Un invento sensacional del profesor Tornasol comienza por provocar catástrofes en el castillo de Moulinsart; todos los vidrios estallan, ¡así como la mayoría de los objetos de cristal! Por desgracia, este hallazgo no entrará a formar parte del surtido de artículos de broma. Unos espías intentan capturar a Tornasol para obtener sus planos. Parece ser que los secuestradores son bordurios, los eternos enemigos de los syldavos, y muy decididos a transformar el invento de Tornasol en un arma de destrucción masiva.